miércoles, 30 de enero de 2008

Frágil.

TITULO ORIGINAL: Frágil
AÑO: 2004
DURACIÓN: 112 min.
PAÍS: España
DIRECTOR: Juanma Bajo Ulloa
GUIÓN: Catalina Gilabert
MÚSICA: Bíngen Mendizábla & Borja Ramos
FOTOGRAFÍA: Unax Mendía
REPARTO: Muriel, Julio Perillán, Imma Colomer, Maria Bazán, Silvia Segovia, Lidia Navarro, Bibiana Schönhöfer, Paula Pizzi, Violaine Estérez, John G. Rubin, Paul Black, David Christoffersen
PRODUCTORA: Frágil Zinema / Gasteizko Zinema
WEB OFICIAL: http://www.fragil.net/

Valoración: 6,5.


Venus (Muriel), vive en el campo con su padre. A la muerte de este, se encamina hacia la gran ciudad en busca de su amor de la infancia David (Julio Perillán). A partir de aqui, Juanma Bajo Ulloa, director de la taquillera "Airbag" y las aclamadas por la crítica "La Madre Muerta" y "Alas de Mariposa", hace un ejercicio cinematográfico interesante aunque (y esto lo explicaré más tarde) postreramente irritante.

"No soy Heidi, soy Venus."

Como ocurriera con Donnie Darko, ya criticada en este blog, las circunstancias que me han llevado a ver esta película son algo peculiares. Ultimamente no veo mucho cine español, pero pusieron esta cinta en el programa versión española de la 2 y aunque solo ví la tertulia posterior, los comentarios del director acerca de lo que quiso contar me parecieron interesantes y me picó la curiosidad. Además, y esto sucedió bastante más tarde, supe que una de mis amistades ciberneticas de Facebook (una chica muy guapa y a la que saludo si lee esta crítica) habia participado como figurante en la producción. De modo que, si "Frágil" es hija de los cuentos tristes, esta crítica lo es de la curiosidad y el cotilleo inocente.

"En esta pelicula, es que me salí, amiguitos."

Pero ah, paradojas de la vida, he aqui que me he encontrado con una historia llena de matices y cuatro buenas interpretaciones. A destacar la actriz protagonista Muriel, Inma Colmener y el cuarteto femenino de la mansión donde transcurre buena parte de la película: María Bazán, Silvia Segovia, Lidia Navarro y Bibiana Schönhöfer. El amigo Julio Perillán pues, hace lo que puede, pero no es hasta bien entrada la película cuando va cogiendo tono, pero tampoco mucho.

Hay escenas de gran calado y muy buena factura visual (la de la estación de autobuses, por ejemplo), casi siempre apoyados en la excelente interpretación de la actriz protagonista y muchos detalles oníricos que nos mantienen en el tono de cuento de hadas que impregna la cinta.

"Somos unas resabidas."

Es esta una película que habla, no ya del amor, sino de la inocencia que vamos perdiendo con el transcurso de los años y plantea además, un dilema a mi entender. ¿Quien es el frágil? ¿Aquel que se adapta al mundo y sus reglas y entierra la inocencia de la niñez y la adolescencia en una especie de claudicación vital o el que, a pesar de todo y de todos, las conserva contra viento y marea? ¿O es la ingenuidad una mentira o una máscara? Otros podran hacer lecturas distintas, pero siempre sobre el tema de las apariencias, de las máscaras que nosotros mismos nos construimos para sobrevivir o la mentira del amor. Personalmente pienso que creer o no creer en dragones y princesas es una cuestión, como todo en esta vida, de elección y que ser feliz, a pesar de que el mundo no es precisamente un lecho de rosas, una muestra abrumadora de fortaleza. Y ya corto el rollo profundo, que empiezo a levitar y no llego a las teclas.

A destacar tambien la calidad de la banda sonora, aunque en ocasiones se hace demasiado densa para lo que se esta contando.

Si por algo me ha gustado esta película es que, por lo menos en mi caso, ha conseguido hacerme sentir como los personajes: frágil por un momento pero irritado al momento siguiente porque el director, despues de pensarlo fríamente acertadamente por su parte, nos saca la carta marcada de su baraja (y no dire más). Ya lo dice el slogan de la película: el amor verdadero es un cuento. Pero amigos, todos y cada uno de nosotros creemos en él. De recomendado visionado.

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